Dimas Gimeno fue el sucesor de su tío Isidoro Álvarez al frente de El Corte Inglés pero su prima, Marta Álvarez, fue quien tomó el relevo hasta hoy día. Con 42 años, Dimas, quiso conocer el mundo digital de los mercados más avanzados como son China y EE UU donde la mitad de la población es nativa digital y el comercio electrónico supone cerca del 60%.
El pasado 26 de mayo, el licenciado en Derecho y escritor de su primer libro, ‘Retail Reset’ , publicado por LID Editorial, fue el protagonista del desayuno empresarial DN Management ‘Retail Reset : Por qué las tiendas físicas son la clave del futuro’. Este evento fue organizado por Diario de Navarra y Brandok, y patrocinado por Caixabank, Lurauto y Cistec con la colaboración de Hotel Tres Reyes.
Gimeno en su libro apuesta por su “renacimiento” convencido de que en el futuro no va a haber “experiencias” solo físicas o solo digitales y que los dos mundos están condenados a convivir. “El canal digital ha ganado en la compra racional pero hay otra compra que tiene que ver con las emociones donde el factor humano, que se ha minusvalorado, es clave”.
La distribución comercial se enfrenta a un cambio de paradigma y el termino figital que hace referencia a la conexión de dos entornos: el online y el offline se va haciendo un hueco cada vez más grande en el mundo del marketing. Se trata, dijo, de una forma nueva de llegar simultáneamente a los clientes a través de dos canales y en la quizá lo más novedoso sea que también lo digital necesita estar en lo físico.
Dimas también se ha inmerso en el comercio minorista con un nuevo sello: la marca Wow. Un nuevo concepto en el que se despliega el concepto de compra sensorial y que cuenta con una tienda física en Gran Vía y un Marketplace (web de comercio electrónico) totalmente integradas.
Entre las lecciones que Gimeno extrajo destaca que “el retail no está en muerto” y el rol de las tiendas físicas será en el futuro más importante que nunca. Pero para que esto suceda, advirtió, “tenemos que cambiar las tiendas porque no ofrecen una experiencia de compra memorable”. En definitiva, darle al cliente una razón para que vuelvan. “Lo que está pasando trasciende a lo empresarial. Hay un cambio social; no sólo los clientes han cambiado, también los competidores y el mercado”. De ahí su apuesta por “volver a enfocar la foto” porque “los actores han cambiado y no vale hacer lo que hemos hecho hasta ahora”. Un cambio de paradigma provocado por las nuevas tendencias de consumo, la sobreoferta de marcas, productos y servicios, la digitalización, los nuevos negocios disruptivos y el crecimiento de las grandes plataformas de comercio eléctrico que exige una completa transformación.
Durante su conversación con Belén Galindo, directora de comunicación del Grupo La Información, Gimeno no escatimó en elogios hacia el comercio español con referentes mundiales como El Corte Inglés, Inditex o Mercadona, “que se estudia en Harvard”.
Con todo, dijo, “la velocidad de los cambios sociales trascienden a nuestra manera de comprar” y obligan al sector del retail a dar un paso al frente. “En el 2000 teníamos que ser globales, pero en diez años surgió la digitalización y luego la socialización y la sostenibilidad”.
Frente a la aparente disrupción que conlleva el término figital, si en algo hizo hincapié Gimeno fue en la necesidad de que las tiendas además de afrontar su digitalización vuelvan a estar con los clientes. En definitiva, que sean tenderos, “el mejor oficio del mundo” que el fundador de El Corte Inglés, Ramón Areces, tío de Isidoro Álvarez, aprendió en Cuba durante sus años de aprendiz en los almacenes El Encanto, fundados a finales del XIX. “Hay que cambiar todo para no cambiar nada” concluyó parafraseando a Giuseppe Tomasi di Lampedusa.
Dimas Gimeno ha llegado a un acuerdo con una galería y tendrá NFT (tokens no fungibles, según sus siglas en inglés) expuestos en las más de 150 pantallas de su nueva tienda de la Gran Vía. La anunció en primicia durante el desayuno. “Es metaverso pero llevado a la realidad porque lo exponemos”, remarcó. Para este empresario experto en distribución, el metaverso abre al retail un mundo donde cualquier experiencia se vuelve posible y accesible y está llamado a jugar un papel «siempre que tenga enganche con el mundo real» y sin olvidar ese ‘encanto’ que Ramón Areces se trajó de Cuba para replicarlo en una pequeña tienda situada a pocos metros de la Puerta de El Sol de Madrid que acabaría convirtiéndose en uno de los grupos empresariales más importantes del país.